Tafsir II Suratul Fatiha

بسم الله والحمد لله والصلاة والسلام على رسول الله ، وبعد

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Aleya 1

الحمد لله رب العٰلمين
«Toda alabanza pertenece a Allah, Señor de los Mundos»

Alhamd es alabar con amor, gloria y honor. Para alabar a Allah, hay dos condiciones: la primera, glorificarLo; y la segunda es amarLo con el fin de agradecerLe sinceramente, lo cual es un acto necesario, a través de ratificar y completar nuestro tauhid con nuestros actos de obediencia y no utilizando su generosidad desobedeciéndoLe. De este modo, nuestro agradecimiento a Allah tiene una dimensión extra más allá de meras palabras.                                                                                                                                           

Como creyente, necesitas recordar los Nombres de Allah y Sus Atributos que amamos y apreciamos. Los verdaderos creyentes están contentos con la misericordia de Allah, Su fuerza y Su justicia. Aprecias y valoras que Allah es Misericordioso y Perdonador; por ejemplo, ¿podrías imaginar que tu Señor no te perdonase y te castigara por cada error que cometieras? Cometemos errores a diario.

Pero Allah es Al Qarib, Él está cerca y alhamdulillah, Él ama cuando le pides, es El Más Justo y aprecia cada uno de nuestros buenos actos, nada es en vano. Es tu Señor, el Señor de los mundos, nada ni nadie puede dañarLe u oponerse a Él.  Necesitamos recordar todos los Nombres, Atributos y Actos de Allah, los más hermosos actos, debemos sentirnos felices con cada uno de Sus actos, con Su justicia, con Su poderío, con Su conocimiento que todo lo abarca. Vivimos por Su misericordia y nos arrepentimos de nuestros pecados debido a la misericordia que Él ha tenido con nosotros al conducirnos al arrepentimiento, así como también nos arrepentimos para obtener Su misericordia. No disfrutamos de salud excepto por Su misericordia y no entramos al Paraíso excepto por Su misericordia. Cuando sientes todo esto mientras estás recitando esta aleya, Allah te responderá: «Mi siervo me ha alabado».

Aleya 2:
الرمحن الرحيم
«El Poseedor de Vasta Misericordia, El Otorgador de Misericordia»

Debemos reconocer que vivimos solamente gracias a Su misericordia, comemos gracias a ella, Él es Quien hace que nos levantemos cada mañana gracias a Su misericordia y todos y cada uno de los buenos actos que podemos hacer se deben a Su misericordia.

Aleya 3:
مٰلك يوم الدين
«El Único Poseedor del Día de la Retribución». 

Al Málik significa ‘el Poseedor (de todo)’, mientras que Al Malik significa ‘el Rey’.

Allah no es solo El Dueño del Día de la Retribución, sino que también es el Dueño de toda la creación. Entonces, ¿por qué Allah dice «El Único Dueño del Día de la Retribución»? ¿Por qué no dice «El Dueño del universo»? Esto es porque Allah es el Rey hoy, mañana y en el Día de la Recompensa; sin embargo, en el Día de la Recompensa es cuando se hará visible  Su dominio, Su realeza y Su absoluta autoridad.

Todos los que fueron reyes y altos cargos en esta vida mundana se presentarán sumisos ese día, y los malos serán humillados, tanto que incluso no podrán ni levantar su vista. Nadie podrá hablar si no escon el permiso de Allah, incluído el profeta Muhammad, la paz sea con él; tampoco el resto de profetas ni los ángeles. Nadie, absolutamente nadie podrá hablar sin permiso de Allah.  ¿Puedes notar Su completo dominio y autoridad en ese día? Por esta razón, todos y cada uno de nosotros debemos prepararnos para ese día, porque todos y cada uno de nosotros lo vamos a afrontar. Ese día Allah va a preguntar: لمن الملك اليوم «¿A Quién pertenece todo el Reino (o Reinado) hoy?». Sin embargo, nadie osará contestar a esa pregunta, porque Allah no les dio permiso, solamente está diciendo eso sin ser una pregunta. Por lo que Se responderá a Sí Mismo:  لله الواحد القهار «A Allah, El Único, El Todopoderoso».

Aleya 4: 
إياك نعبد وإياك نستعين
 «A Ti (Sólo) adoramos y en Ti (Sólo) buscamos ayuda». 

El ya fallecido sabio del islam, Ibn al Qayyim, que Allah tenga misericordia de él, escribió un libro llamado Madarij as Salikín solamente para explicar esta aya. ¿Puedes creértelo? ¡Un libro completo solo para esta aleya!En árabe إياك significa “a Ti (Sólo)” y نعبد   “adoramos” (tauhid al uluhiyah).

En árabe esto significa que dirigimos nuestra adoración exclusivamente a Él y no a otros. Por ejemplo, si tienes un grupo de amigas y le dices a una te quiero, ¿estás indicando con esa frase que la quieres solo a ella o esa frase deja margen a que también quieras a las demás? Sí, esa frase deja abierta la posibilidad de que quieras también a las demás, por lo que debes decirle te quiero sólo a ti. 

En cuanto a la palabra “adoramos”, ¿por qué la digo en plural si yo soy sólo una sierva de Allah? Porque, en realidad, somos uno de entre todos Sus siervos. Por lo tanto, solo a Él adoramos y solo a Él pedimos ayuda.

El ser humano necesita la ayuda de su Creador, incluso para adorarLe: cuando vamos a rezar, para ayunar, para ser honestos y verídicos, o cuando nos ponemos el hiyab. Esto es algo que no podemos hacer sin Su ayuda, por lo que debemos pedírSela hasta para que nos capacite para rezar: si Él no te facilita, ¿cómo vas a poder rezar? No podrás, ni adorar a Allah de ninguna manera excepto si Él no te guía y te da ayuda para ello, y esto requiere de sumisión por tu parte; es decir, reconozco que no puedo adorar a Allah si no es con Su apoyo y ayuda.

Entonces, ¿cuál es el objetivo de mi vida? Adorar a Allah exclusivamente. La gente pasa su vida preguntándose por qué están aquí, en esta vida, incluso algunos llegan al suicidio desesperados por no saber esto. Lo tienen en el Corán, en la primera página, Allah lo dijo a todos los profetas anteriores a Muhammad, salahlahu aleihi wasalam, así como a él también. Este es el objetivo de nuestra vida: no es comer, no es ver la televisión ni pasar un rato divertido con las amigas en el cine, no. Nuestro objetivo en esta vida es adorar a Allah en exclusiva, buscar Su satisfacción volviendo a Él con sincero arrepentimiento constantemente, buscar Su ayuda en cada momento, todo eso es adoración y todo esto lleva a un solo camino: al Paraíso.

¿Y cómo puedes saber qué es todo lo que ama Allah y aquello con lo que Se complace, es decir, la adoración? Necesitas conocimiento, necesitas aprender y entender lo que estudias  para poder aplicarlo, ya que no puedes adorar a Allah sin conocimiento, rezar realizando unos movimientos sin saber por qué, ayunar porque sí, sin motivo alguno, sin saber por Quién estás rezando o ayunando. Adoración es cumplir con todos los mandatos de Allah y evitar todo lo que Allah ha prohibido: ¿cómo puedes hacer todo esto sin conocimiento? 

Por ejemplo, a veces, se nos presentan ocasiones en las que queremos complacer a alguien y no conocemos sus gustos, queremos hacerle un regalo, pero no sabemos qué le gusta. ¿Qué hacemos entonces? Preguntamos a sus más cercanos qué gustos tiene esa persona porque queremos saber cuál es la mejor manera de complacerla. Esto es lo que pasa cuando queremos complacer a Allah, hemos de hacerlo con el conocimiento de qué es lo que Le complace, debo buscar conocimiento de Sus órdenes y prohibiciones para así hacer lo que Le gusta y de la manera en que Le gusta. Por esto Le pedimos que nos guíe y nos dé el conocimiento beneficioso, aquel sobre el que podemos y debemos actuar.

Adorar a Allah no es únicamente rezar, ayunar, suplicar, recordarlo, sino que es seguir aquello que complace a Allah en cada situación de tu vida. Tu único objetivo es saber cómo complacer a Allah y complaciendo a Allah complacerás a tu marido, a tu madre, a tus hijos. ¿Por qué? Porque todos los mandatos que Allah hizo descender con la Revelación respecto al marido, los padres y los hijos no traen más que honor hacia ti y hacia ellos, por lo tanto, obedeciendo a Allah, Le complaces a Él y también a ellos. Luego Allah nos ordena obedecer a nuestros maridos en el bien, así que lo hacemos complacidas. Pero ¿qué pasa si nuestros maridos nos ordenan desobedecer a Allah? ¿Y si nos ordenan quitarnos el hiyab o cualquier otra cosa prohibida? ¡¡¡No, gracias!!! No quiero esta humillación a la que me quieres someter. Es humillante no obedecer a Allah para obedecer a alguien de la creación; además, en estos casos donde un ser humano nos obliga hacer algo prohibido, no debemos pensar en cómo decirle que no lo harás, o que esta persona se va a enfadar, no: has de ser amable cuando digas que no le obedecerás, pero has de estar contenta de que hayas tomado una gran decisión, la de obedecer únicamente a tu Señor. ¿Por qué? Porque Allah solo te prohíbe las cosas que son dañinas y malas para ti, por lo que, si sabes esto, siempre tendrás claro qué decisión tomar.

Fuente: La presente es una traducción de la clase para hermanas impartida en inglés por la estudiante de conocimiento Zayneb Al Kateb basado en la explicación de Shaij Uzaymín  de Suratul Fatiha